PEINADO Y MAQUILLAJE DE NOVIA

Buenos días a tod@s! Ya estamos en viernes!

Continuamos con algún post de la boda, me gustaría haberlo publicado antes esta semana, pero ha sido un poco de locura y por ello, llega otra vez en viernes. Hoy toca:

PEINADO Y MAQUILLAJE DE NOVIA

Y de paso aprovecho para comentaros algunos aspectos que yo les digo a las novias a las que asesoro y con las que conjuntamente, estamos organizando la boda de sus sueños.

Y es que después de haber estudiado Protocolo y Organización de Eventos y conocer bien el sector porque parte de mi trabajo consiste en eso, antes de nuestra boda pero sobre todo a raíz de ella, he estado atendiendo numerosas consultas de futuras parejas que no saben cómo comenzar con su gran día, así que llevo desarrollando la faceta de Wedding Planner en secreto un tiempo, pero ya os lo explicaré mejor en otro post... (Más info aquí.No sabéis lo bien que me lo paso dándoles ideas y ayudándoles en todo y viendo, sobre todo, esa cara de satisfacción y esas sonrisas!).

Lo ideal es no sentirse disfrazada en ningún momento, ni pretender arriesgar utilizando maquillajes transgresores e innovadores...

En cuanto a maquillajes de novias soy de las que piensa que la premisa "menos es más" es siempre un acierto.

Sobre todo, hay que diferenciar si la boda se celebra de día o de noche. De día hay que optar por la naturalidad y sencillez, y si es de noche, se puede arriesgar un poquito más.

Yo lo tenía claro, no soy una persona que se maquille mucho, y cuando lo hago, resalto mis ojos (sin exceso, siempre muy natural) y los labios con un tono natural, y es más que suficiente.

Y ese día, optamos por lo mismo: un maquillaje sencillo y natural, unos labios con un ligero toque de un rosa natural, tirando a tostado, y en los ojos, siempre naturales, jugamos con unas sombras azules combinado con dorado muy sutiles.

El peinado para mí fue clave y lo tuve muy claro desde el principio. De hecho la peluquera ya había pensado cuál era el peinado que más me favorecía según su criterio, un moño alto precioso. Y aunque todo mi entorno reitera que estoy más favorecida con el pelo recogido, yo casi siempre lo llevo suelto.

Y eso era lo que yo quería ese día: ser yo!

Quizá si hubiera aparecido con todo el pelo recogido, hubiera causado sensación...sobre todo por el contraste. Pero el pelo recogido era incompatible con la idea que yo llevaba en la cabeza y por ello tenía claro que tenía que ser un semirecogido.

Habíamos estudiado el peinado y los complementos y era lo que más cuadraba a priori. Además, yo tengo mucho aprecio a mi melena y ese día, tenía que lucirla!

No obstante, probamos tres peinados, y con el último, una coleta semilateral, aunque sabía que no iba a ser la opción ganadora, fue con el que me fui a una de las pruebas del vestido (maquillada y peinada, el efecto cambia, así que yo, lo recomiendo con creces!), pero quería comprobarlo in situ!. Pero una vez allí, vi claramente que el semirecogido ganaba por goleada y que no me había equivocado con mi idea inicial...

Así, sabiendo que debía de ser un semirecogido sí o sí, mi peluquera se puso manos a la obra (gracias Olga!) y el resultado aquí:

Un semirecogido con un poco de volumen y con el pelo ligeramente ondulado para que yo no me viera "tan peinada"...

A mí me encantó desde el primer momento..., y además permitía lo que dentro de poco veréis..., y es que el peinado se transformara a la par que el look lo hacía...

Y hasta aquí esta primera toma de contacto con los preparativos necesarios antes de vestirse blanca y radiante!.

Un abrazo muy fuerte y que tengáis un buen fin de semana!