He comenzado el 2024 en calma, en paz y serena, muy serena. Puede que cuando leemos esto pensemos que es fácil, pero no lo es. Después de un 2023 que me ha enseñado muchísimo y del que he aprendido más sobre la vida y sobre las personas en 365 días que en el resto de mi vida, empiezo este lienzo en blanco de 2024 tranquila. Y eso, os aseguro que es mucho, muchísimo.
Tenía ganas de escribirlo por aquí y volver un poco a esta ventana que me ha dado tanto y que me sigue haciendo la misma ilusión, aunque el año pasado estuviera un poco desaparecida. Es por eso, que me apetecía compartir este primer post aquí.
La foto es de hace unos días en Cracovia, tomando un delicioso chocolate caliente mientras disfrutaba de esas vistas maravillosas y de la mejor compañía que pudiera imaginar y haciendo lo que más me gusta: VIAJAR.
Hoy comienzo la vuelta a la rutina con ilusión pero al mismo tiempo, con tranquilidad. Veo mucha emoción por cumplir propósitos, retos, regreso a la vida sana, a los gimnasios, al orden... pero yo prefiero hacerlo a mi ritmo. Hacer las cosas impuestas y porque tocan, nunca fue lo mío. Después de tantos años conmigo misma... ¡me conozco muy bien! Y sé que yo soy la que marca mi ritmo y para que este se cumpla, tengo que ser compasiva conmigo misma.
Me gustaría decirte que no tengo grandes retos ni propósitos más que seguir disfrutando de la vida como hasta ahora, rodeada de la gente que me quiere y a la que quiero, sin hacer daño a nadie e intentado ser cada día mejor persona, eso es algo que tengo muy claro, pero tampoco ser tan buena ni tan tonta como para caer en manipulaciones de personas narcisistas y tolerar todo, esto es una lección muy aprendida que me llevo conmigo y que estoy orgullosa de tenerla tan clara hoy. La parte buena es que nada cae en saco roto y todas las vivencias te hacen convertirte en alguien mucho mejor, aunque sea a la fuerza. Y lo mejor de todo es tener a mi alrededor tantas personas faro, personas bonitas que me hacen sentirme tremendamente afortunada: a esas las quiero en el 2024 y siempre, por favor.
Fluir sigue siendo uno de mis objetivos en la vida porque aunque queramos tenerlo todo controlado, lo cierto es que ni lo tenemos atado, ni cogido con cuerdas y la vida, cambia en un momento sin avisar.
Cuidarme por dentro, ya que el 2023 también me dio un susto de salud y para este nuevo año lo que quiero es invertir en mí, en mi salud y en mi bienestar, ya no solo a nivel movimiento y deporte que he tenido desatendido este año pasado, sino también en mi alimentación, en mi descanso y en mis pensamientos, ya que estos influyen directamente a nuestra salud y a nuestro estado de ánimo.
Quiero un 2024 sano, fuerte y con claridad, y para eso, uno tiene que poner de su parte, las cosas no se consiguen ni llegan solas..., pero sobre todo quiero un 2024 tranquilo, sin sobresaltos, normal... ¡normal! Del resto ya me iré encargando de que sea especial.
Sin grandes propósitos ni retos, sí que puedo deciros que estoy ilusionada. Me gustan los años pares más que los impares y auguro que este año va a estar bien, o al menos, eso es lo que yo espero.
Os deseo mucha calma, paz y tranquilidad, os aseguro que si la tenéis, tendréis mucho ganado para cumplir vuestros retos e ilusiones.
¡Feliz regreso a la rutina! ¡Feliz regreso a la vida! :)
No tengo propósitos. Paz, tranquilidad y vivir la vida a mi manera
ResponderEliminarA por ellos ricura ❤️
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