Creo que no soy la única que está viviendo unos días pletóricos, con energía, ganas de muchos planes y con mucha alegría.
Y el otro día me di cuenta de por qué… ¡La primavera ya ha llegado!
Lo notamos en los paseos, en las terrazas, en la ropa más ligera que empezamos a vestir… Así que he pensado traer algo de esa alegría y buenas sensaciones que se ven por las calles y ver cómo meter la primavera en casa.
Viendo cómo hacerlo he encontrado algunos cambios que se pueden llevar a cabo en todas las casas.
Por ejemplo, podemos buscar textiles con diferentes texturas o con colores más divertidos. O, incluso, si queremos un gran cambio, podemos renovar la imagen del salón con un papel pintado que refleje esa alegría primaveral.
Además, si queremos dar un toque diferente, también podemos pintar las paredes o buscar muebles con colores verdes porque los tonos verdosos, cálidos y terrosos son los que más nos recuerdan a la primavera.
No podemos olvidar buscar elementos realizados con materiales como fibras, madera o piedra caliza. Además de crear atmósferas tranquilas, nos acercan un poco más a la naturaleza.
Por ejemplo, las lámparas realizadas con estos materiales combinándolas con pantallas de cristal o tela nos dará ese toque natural perfecto para cualquier rincón.
O una alfombra de yute, transformará totalmente cualquier estancia.
Otra idea es la de utilizar panelados de madera para separar ambientes. Así también tendremos ese toque de la naturaleza, permitiendo jugar con la luz de las estancias.
La primavera también puede venir con los aramos. Gracias a los ambientadores podemos buscar aromas florales y frutales que llenarán la casa de vitalidad y energía.
O en el día a día. ¿Qué mejor que una vajilla de flores para llenar tu mesa de primavera?
Puede ser de colores vibrantes o con un toque vintage. Y también los textiles como paños de cocina, toallas, etc. Pequeños detalles que harán mucho
Y, por supuesto, no hay mejor manera de recibir a la primavera que llenando la casa de flores y ramos.
Busca bouquets y arreglos florales (o incluso con frutas) en el recibidor o mesas.
