No es ningún secreto si digo que viajar es mi gran pasión. La emoción de preparar qué ver en el destino, la adrenalina en el avión… ¡Incluso preparar maletas me parece de lo más entretenido!
Muchas veces, en cuanto tengo un momentito, disfruto buscando nuevos destinos, viendo qué escapada hacer y por qué no, fechas especiales que pasar en algún lugar diferente.
Por eso, ahora que se acerca San Valentín he decidido dejarte por aquí algunos destinos europeos perfectos para hacer una escapada un fin de semana y celebrar con tu pareja el amor.
He seleccionado 5, pero, por supuesto, ¡hay muchos más!
Venecia (Italia)
Un lugar mágico que disfrutar en pareja y que hará inolvidable vuestra escapada romántica. Venecia ofrece una atmósfera única y mágica con sus canales serpenteantes y su arquitectura histórica. Y, por supuesto, un paseo en góndola es una experiencia obligada para cualquier pareja que visite la ciudad. Además, ¿cómo no disfrutar de la auténtica cocina italiana? Como recuerdo, vuestras fotografías en lugares icónicos como la Plaza de San Marcos y el Puente de Rialto, harán de esta escapada el regalo perfecto.
Por supuesto, no puede faltar la “ciudad del amor”, el destino romántico por excelencia. Para ver de forma extensa la ciudad se necesitan varios días, pero una escapada corta es perfecta para ver sus monumentos más emblemáticos como la Torre Eiffel o Notre Dame y pasear por los Campos Elíseos, la rivera del Sena o el barrio de Montmatre.
Y para que la escapada tenga un punto todavía más romántico, no olvides incluir disfrutar de una cena en un bistró acogedor o un paseo en barco por el río Sena al atardecer.
Una ciudad muy romántica y que me tiene robado el corazón. Pasear por sus calles empedradas de la ciudad vieja, visitar su imponente castillo y disfrutar de un paseo por los jardines de Princes Street. ¡Un plan maravilloso! No dejes de explorar el Parque Holyrood y disfrutar con las vistas panorámicas desde Arthur's Seat.
Un cuento de hadas. Así podría definir a esta ciudad. Con sus calles adoquinadas, sus románticos puentes y sus castillos medievales es un escenario perfecto para paseo de lo más romántico. No olvides visitar la Plaza de la Ciudad Vieja y su reloj astronómico, el Puente de Carlos, el Castillo, la Catedral de San Vito, la Torre de Petřín y los jardines que la rodean.
Viena es una ciudad elegante, llena de cultura y con una increíble gastronomía. Puedes visitar sus majestuosos palacios, como el de Belvedere, el de Hofburg o el de Schönbrunn, y contemplar imponentes edificios como la Catedral de San Esteban, la Ópera o el Ayuntamiento. Por supuesto, no podréis marcharos sin probar la famosa tarta Sacher, un pastel riquísimo de chocolate y mermelada.
No sé tú, pero a mí me han dado ganas de visitar cualquiera de estas ciudades. ¡Voy a ponerme a mirar vuelos para ver cuál será mi próxima escapada!
¿Y a ti? ¿Cuál de estas ciudades te apetece más visitar? ¿Va a ser tu escapada para San Valentín? ¿Tal vez el regalo a tu pareja? Te leo en comentarios.
